Si eres un gran aficionado a los
deportes de nieve, como el esquí o el
snowboard, entonces estas de suerte. Pese a lo que pueda parecer, España
tiene varias regiones montañosas donde durante la temporada de invierno es
posible realizar deportes de nieve de
cualquier nivel y disciplina.
La zona esquiable más al norte
es la Cordillera Cantábrica, la cual
cuenta con estaciones de esquí para uso local, ya que las montañas más altas
apenas superan los 2.000 metros. Asturias
cuenta con las estaciones de esquí de Fuentes de Invierno y Valgrande-Pajares y
muy cercanas a ellas se encuentran las estaciones invernales de San Isidro, El
Morredero y Leitariegos, en la provincia de León. Cantabria, Burgos y Orense también cuentan con pequeñas estaciones de esquí: Alto
Campoo, Lunada y Manzaneda respectivamente.
El gran foco de estaciones de esquí españolas se encuentran en los
Pirineos, repartidas entre Huesca, Lérida y Gerona y compiten con las estaciones
de Andorra y del Pirineo francés por la mayor afluencia de esquiadores de la
zona. En Lérida se encuentran las
estaciones más amplias del Pirineo español, con emplazamientos que superan
los 100km esquiables por estación (Baqueira – Beret). Otras estaciones de
Lérida no se quedan cortas ni en afluencia de visitantes ni en kilómetros
esquiables, como Boi Taül, Espot Esquí, Port Ainé, Port del Comte y Tavascán.
En Huesca encontramos estaciones más enfocadas a los grandes
desniveles y
más apropiadas para esquiadores con un cierto nivel, como Candanchú, Cerler o
Panticosa, aunque también incluyen grandes valles y pistas para principiantes,
como Astún y Formigal. Gerona cuenta con
las estaciones más pequeñas (en comparación claro está) de los Pirineos,
equipadas con un número menor de grandes hoteles: La Masella, Vallter 2000, La
Molina y Vall de Núria. Lo complicado es encontrar un buen hotel a buen precio en las zonas de esquí dado que la demanda es altísima en época alta.
Los aficionados que viven en Madrid y alrededores no tienen que irse
hasta tan lejos como los Pirineos para poder esquiar, ya que el Sistema Central cuenta con altitud
suficiente para albergar estaciones de esquí. En la Comunidad de Madrid nos encontramos con el Puerto de Navacerrada y
Valdesquí, dos estaciones muy populares, y en
Castilla y León se encuentran La Pinilla y La Covatilla, estaciones más
pequeñas que las de Madrid.
El Sistema Ibérico también alberga algunas pequeñas estaciones de
esquí, repartidas entre Teruel
(Javalambre y Valdelinares), Burgos
con el Valle del Sol y La Rioja con
Valdezcaray, muy popular en la zona. Por último, todos los aficionados a los
deportes de nieve que vivan en la región
sur de España cuentan con Sierra Nevada, un conjunto de estaciones de esquí unidas entre sí que se
extiende por toda la sierra creando un entorno único y que además cuenta
con el pico más alto de toda la península ibérica, el pico Veleta.
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