Qué ver si visitas Edimburgo

Como todas las ciudades que visitas por primera vez, siempre es difícil saber qué visitar en el poco tiempo de que dispones. En el caso de Edimburgo, la ciudad se encuentra dividida en dos: la parte vieja medieval (Old Town) y la ciudad nueva del siglo XVIII (New Town). La parte alta del Royal Mile es un lugar perfecto para empezar a explorar la ciudad a pie. El castillo de Edimburgo es la atracción más importante de Escocia y sin lugar a dudas se merece una visita.

Si bien también hay que ir a ver las joyas de la corona escocesa y la piedra del Destino, hay que tratar de pasarse por el cementerio de perros, dedicado al recuerdo del mejor amigo del hombre y del soldado. Desde las murallas del castillo es donde mejor se ve Edimburgo dado que es el punto más elevado de la ciudad. Al otro lado de la explanada del castillo, vais a poder encontrar The Spirit of the Tattoo, un nuevo centro de información gratuito donde descubrir la historia del Military Tattoo. Muy cerca tenéis el museo del whisky escocés, con degustación gratuita al final de la visita.

La ciudad de Edimburgo está rodeada de colinas con excelentes puntos panorámicos. Si el volcán apagado del parque de Holyrood está más allá de tus fuerzas, Calton Hill, cerca de Princes Street, estará sin duda más al alcance. Aquí es donde debía de haberse erigido el monumento nacional de Escocia, pero como la ciudad ya no tenía dinero solo se acabaron las columnas, lo que le ha valido el nombre de "la vergüenza de Edimburgo". No dudéis en escalar hasta la cima de la colina para ver de más cerca el monumento de Nelson con forma de telescopio. La bola que hay encima de la flecha cae exactamente en el momento en que el cañón relojero (One O’Clock Gun) retumba desde lo alto del castillo.

Por la tarde merece la pena hacer una visita al jardín botánico real, a los invernaderos que acaban de ser remodelados, a las exposiciones y a todo un mundo colorido de plantas y arbustos. Es en esta zona donde vienen los habitantes de Edimburgo a recobrar fuerzas y a tomarse un té vigorizante.

Si buscáis alojamiento en Edimburgo, entonces os recomiendo Castle Rock. Se trata de un hotel de backpackers escocés situado justo detrás del castillo de Edimburgo y a tres minutos de la calle principal Lawnmarket, en donde hay un montón de tiendas de souvenirs, restaurantes y donde, a lo largo de ella, se encuentran los distintos monumentos de la ciudad. Por si le interesa a alguien, hace poco descubrí que al reservar alojamiento en Edimburgo con HostelBookers os podéis ahorrar £19,67.

Es importante reseñar que en verano la ciudad se llena de turistas y artistas venidos de todo el mundo, por lo que hay muchísimas opciones de alojamiento en Edimburgo donde puedes dormir en literas compartiendo habitación, utilizar la cocina y zonas comunes. Es una buena manera de tener alojamiento a precios asequibles.