Tercer día en Sydney

. martes, 10 de junio de 2008

Bueno, pues para variar otra vez a madrugar, esta vez a las 6 de la mañana. Toca viaje hasta las Montañas Azules.

A medio camino entre Sydney y las Montañas Azules se encuentra el parque Featherdale (unos 40 minutos desde Sydney), lugar donde se puede disfrutar de la fauna australiana. Ahí podemos encontrar cocodrilos, koalas, canguros, etc... Incluso si se deja ver podéis ver al demonio de Tasmania. A la entrada del parque se puede comprar comida para dar de comer a los canguros, son de lo más graciosos. El parque se puede visitar todos los dias desde las 9:00 a.m. hasta las 17:00 p.m.


Tras visitar llegar el parque, llegamos hasta las Montañas Azules. Se llaman así porque suele haber siempre una neblina azulada provocada por los rayos de luz que dan sobre las gotas de aceite dispersas sobre los árboles. Lo más destacado de este parque es la formación rocosa conocida como las tres hermanas, tres rocas de aspecto similar que destacan del resto de las montañas. Se puede dar un paseo por el parque para contemplar las diferentes especies de plantas y árboles existentes. Para bajar hacia el paseo se puede hacer bien en un trenecito o en funicular. Aconsejo el trenecito, es como ir en la montaña rusa. La entrada son unos 20 dólares australianos. Si se quiere, se puede ver el parque desde un teleférico (desde aquí se ven muy bien las cascadas). Hay un restaurante tipo buffet en el parque para los que se quieran quedar a comer. Este tiene un plataforma giratoria de tal forma que mientras comes, vas girando para así poder contemplar todo el parque natural.



Después de comer, volvimos hacia Sydney, entre la distancia y el atasco para entrar, llegamos a media tarde, momento para pegarse una duchita y salir a cenar y a tomar algo por la zona mas "pijilla", Darling Harbour. Se encuentra situado muy cerca de al bahía, y las cenas no son muy caras (unos 20 - 20 dólares) para ser la zona del puerto. Eso sí, la comida a base de pasta y carne, muy poca variedad con el pescado. Después a tomar algo, mucho cuidado con lo que pedís, que 2 por coca-colas y 2 heineken nos cobraron 28 dólares. Si, beber es bastante caro en Sydney. Por fin nos habíamos acostumbrado al horario australiano.

Al día siguiente partimos hacia nuestro siguiente destino: Ayers Rock.

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