El Harbour Bridge o Puente del Puerto es la segunda atracción más importante de Sydney. Se trata de un puente ubicado sobre la Bahía de Sydney, el cual conecta al centro financiero o distrito de Central Business con la costa residencial y comercial de la ciudad. Su construcción duró 8 años, y desde entonces es considerado como uno de los puentes más bellos del mundo y definitivamente el más grande del planeta (aunque no el más largo). Dentro de él, podemos encontrar 8 carriles para el paso de vehículos, dos líneas de tren, una vía peatonal y otra para ciclistas. Lo mejor para visitarlo es hacerlo a pie, puesto que se puede subir por las escaleras mecánicas que hay en ambas orillas que conducen al lado oeste del puente donde hay un carril peatonal.
El puente es el principal punto de acceso al centro de la ciudad de Sydney, y en hora punta, los atascos pueden llegar a ser bastante importantes (dicen que pueden circular diariamente 160.000 vehículos). Está construido con arcos de acero y tiene mucha actividad en fechas importantes como Año Nuevo. Si vais a ir en esta época del año, vais a poder tomar excelentes fotos de las embarcaciones y el mar iluminados por los fuegos artificiales que salen desde su interior. Para los más atrevidos, se puede subir andando hasta su punto más alto (Pylon Lookout) y observar la ciudad desde 87 metros de altura. Desde aquí hay unas magníficas vistas del puerto de Sydney y del famoso edificio de la Ópera.
El BridgeClimb (que es como llaman a esta espectacular escalada), es una experiencia que permite escalar hasta el punto más alto del arco del Puente de Sydney. Se puede elegir entre tres formas distintas de realizar esta actividad: escalada exprés (Express Climb), escalada del descubrimiento (Discovery Climb) y escalada del puente (Bridge Climb).
Si queréis más información, podéis visitar la página oficial (en castellano): Página Oficial
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